Actuaciones de conservación y seguimientoen reservas naturales fluviales

ACTUACIONES DE CONSERVACIÓN Y SEGUIMIENTO EN RESERVAS NATURALES FLUVIALES

Las Reservas Hidrológicas son ríos o tramos de río, lagos, acuíferos y masas de agua o partes de las mismas, que han sido declarados como tales por sus especiales características o importancia hidrológica para la conservación en estado natural. Esta figura se incorpora al ordenamiento jurídico español con el Reglamento de Dominio Público Hidráulico (Real Decreto 849/1986, de 11 de abril, modificado por el Real Decreto 638/2016) y se convierte en una realidad tras la  aplicación de la Directiva Marco del Agua (2000/60/CE) y del Plan Hidrológico Nacional (Ley 10/2001, de 5 de julio) determinándose la existencia de tres tipos de Reservas Hidrológicas:

  • Reservas Naturales Fluviales (RNF). Son aquellos cauces, o tramos de cauces, de corrientes naturales, continuas o discontinuas, en los que las presiones e impactos producidos como consecuencia de la actividad humana no han alterado el estado natural que motivó su declaración. Estos espacios tienen un especial interés de conservación, bien por presentar un elevado grado de naturalidad (vegetación de ribera bien conservada, sin regulación del caudal y sin alteraciones de la morfología o de la calidad del agua) o bien por tener alguna característica especial, como por ejemplo, servir de corredores biológicos por estar en el entorno de espacios de la Red Natura 2000.
  • Reservas Naturales Lacustres (RNL). Son aquellos lagos o masas de agua de la categoría lago, y sus lechos, en los que, teniendo las características de representatividad indicadas anteriormente, las presiones e impactos producidos como consecuencia de la actividad humana no han alterado el estado natural que motivó su declaración.
  • Reservas Naturales Subterráneas (RNS). Son aquellos acuíferos o masas de agua subterráneas, en los que, teniendo las características de representatividad indicadas en los anteriores tipo de reservas, las presiones e impactos producidos como consecuencia de la actividad humana no han alterado el estado natural que motivó su declaración.

Años más tarde, a mediados de la década de los años 2.000 tras la aprobación de la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos (ENRR),  se elabora  un primer Catálogo de Reservas Naturales Fluviales que fue objeto de revisión, por parte de los organismos de cuenca, que incluyó la verificación in situ las condiciones hidromorfológicas, la valoración de la comunidad de peces y la comprobación de la presencia de especies invasoras en esos tramos. El resultado de este proceso fue la elaboración de una propuesta que fue llevada, en septiembre de 2015, al Consejo Nacional del Agua para declarar 135 Reservas Naturales Fluviales, aprobándose finalmente a través del Acuerdo del Consejo de Ministros de 20 de noviembre de 2015, las primeras 82 Reservas Naturales Fluviales que abarcaban un total de  1.755,23 km de río.

Dos años más tarde se declararon otras 53 nuevas reservas naturales fluviales, mediante el Acuerdo del Consejo de Ministros de 10 de febrero de 2017, añadiendo otros 928,74 km de ríos protegido y ya más recientemente tras el Acuerdo del Consejo de Ministros de 29 de noviembre de 2022, se declararon 67 nuevas reservas hidrológicas que incluyeron, por primera vez, Reservas Naturales Lacustres y Subterráneas y se añaden 26 nuevas Reservas Naturales Fluviales.

En estos momentos es España existen un total de 248 RNF que abarcan más de 3.848 km de la red fluvial, 19 Reservas Naturales Lacustres, que abarcan una superficie de más de  12 km2 de sistemas lacustres; y 22 RNS, que cubren más de  1.077 km2.

Una vez declaradas las RNF, los organismos de cuenca responsables de cada una de ellas deben establecer en las RNF declaradas un conjunto de medidas de gestión, que deben contemplar las siguientes actuaciones:

–  Actividades de conservación y mejora del estado de la Reserva.

–  Actividades de evaluación y seguimiento del estado de la Reserva, incluyendo los efectos del cambio climático.

–  Actividades de puesta en valor de la reserva.

BIOSFERA lleva desde 2017 colaborando con los organismos de cuenca (CH DUERO, CH CANTÁBRICO, CH MIÑO-SIL y CH TAJO) y la Dirección General del Agua en la ejecución de actuaciones de conservación  y evaluación y seguimiento en más de una veintena de RNF, principalmente proyectos de mejora del estado,  seguimiento del estado ecológico y el estudio de hábitats y especies de interés ligadas a los ecosistemas fluviales.

Algunos de los proyectos más destacados son:

  • Implantación de las medidas de gestión de la Reserva Natural Fluvial del Río Negro y afluentes (Zamora), 2021-2023. Cliente: CH Duero – TRAGSA.
  • Estudio sobre las poblaciones de desmán ibérico en las Reservas Naturales Fluviales del Noroeste de España, 2021. Cliente: DGA – TRAGSA
  • Estudio sobre el estado de las poblaciones de desmán ibérico en la Reserva Natural Fluvial río Navea I, (Ourense), (Demarcación hidrográfica del Miño-Sil), 2021-2022. Cliente: Ch Miño Sil – TRAGSA.
  • Estudio sobre el estado de las poblaciones de desmán ibérico en la Reserva Natural Fluvial del río Negro, (Zamora), (Demarcación hidrográfica del Duero), 2021. Cliente: CH Duero – TRAGSA.
  • Estudio sobre las poblaciones de Margaritífera margaritifera en la Reserva Natural Fluvial del río Bibey (Zamora), 2021. Cliente: CH Miño-Sil – TRAGSA.
  • Estudio sobre el estado de las poblaciones de Margaritífera margaritifera del rio Eo (Asturias), 2021. Cliente: CH Cantábrico- TRAGSA.